La isla de la "eterna primavera", por su clima sin igual, ofrece enormes contrastes y gran variedad de paisajes en sus distintas zonas. El Parador, situado en el cráter natural de Las Cañadas del Teide, a más de 2.000 metros sobre el nivel del mar, invita al huésped a contemplar impresionantes panorámicas sobre el cono del Teide, la caldera de Chaorra y la Montaña Blanca. Única edificación dentro del Parque, su interior recrea el estilo canario tanto en las estancias comunes como en las habitaciones, y poseen terrazas con impresionantes panorámicas sobre el Teide. Es un auténtico placer degustar los platos de la exquisita y original cocina canaria en el restaurante del Parador. Destacan, entre otros, el puchero canario, el conejo al salmorejo, las papas arrugadas y mojos, y las viejas sancochadas.